10 años de DevOps: transición, crecimiento y futuro

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Cuando el desarrollo de software se convirtió en una tarea incómoda de codificación repetitiva, pruebas y fallos, las organizaciones tenían que encontrar una solución. Un enfoque organizado que no solo eliminaría el ciclo interminable de tareas repetitivas, sino que también establecería una coordinación y ejecución adecuadas en el ciclo de vida del desarrollo de software (SDLC).

Ese enfoque muy sistemático con menos fallos, más producción y coordinación ejemplar hoy en día se llama DevOps.

Todo comenzó un día cuando Andrew Clay Shafer programó una sesión, "Infraestructura ágil", en la Conferencia Agile en Toronto.

Sin embargo, el modelo DevOps en ese entonces no parecía hacer una gran diferencia con los asociados con el desarrollo de software. Pero algo sorprendió al desarrollador Patrick Debois ese día, que presentaba un documento sobre "Infraestructura y operaciones ágiles".

Una larga conversación en el pasillo ese día provocó el incendio de DevOps, que comenzó con Shafer y Patrick tres meses después de su primer encuentro. Juntos, iniciaron Agile Systems Group, con el objetivo de fomentar una mayor colaboración entre los desarrolladores y los operadores.

En la actualidad, el proceso DevOps continúa sobreviviendo según los principios de mayor colaboración y automatización para construir, probar y lanzar software más rápido.

Adopción de dispositivos móviles y devOps

Con el paso de los años, DevOps comenzó a crecer y adquirir fama. Y con la aparición de los teléfonos móviles, la tendencia se aceleró.

La creación de software para dispositivos móviles requiere un enfoque de desarrollo de software elevado. Ahora, las organizaciones tienen que entregar software nuevo y de alta calidad a los clientes lo antes posible para permanecer en la cima del mercado competitivo.

En este nuevo enfoque, las organizaciones deben centrarse en dos factores principales: agilidad y adaptabilidad. Mientras que el primero define la capacidad de codificar y recodificar, el otro marca la capacidad de DevOps para incluir cambios a lo largo del SDLC.

Según Gartner, alrededor de dos tercios de las organizaciones usaban DevOps para respaldar ciertos procesos de negocios a fines de 2017, lo que Forrester denominó el "Año de DevOps". 

Sin embargo, mientras DevOps continuó cambiando la industria del software, la seguridad dentro del proceso sigue siendo una pregunta sin respuesta.

En 2012, los analistas de Gartner Neil MacDonald y Cameron Haight presentaron el concepto de DevSecOps. Esto significó la introducción de la seguridad desde el principio y continuando en todo el SDLC.

La entrada de Security en el modelo hizo de DevOps una práctica más atractiva. Seis años después, DevSecOps ha sido un concepto muy discutido en seminarios, conferencias y contenido escrito.

Pero sigue siendo una cuestión de si las organizaciones están implementando DevSecOps considerando la limitación de tiempo, la necesidad de una entrega acelerada y la comprensión de la importancia de la seguridad en el ciclo.

Para muchas organizaciones, la seguridad todavía no es parte de su ciclo de producción. Sin embargo, es esencial que cualquier organización considere la seguridad si desea permanecer en el mercado competitivo y, lo que es más importante, en la cima.

10 años de DevOps: ¿Y ahora qué?

La aparición de la inteligencia artificial y la automatización han hecho algunas olas en la industria de TI, y DevOps no es una excepción.

DevOps tiene altas predicciones para el futuro. En los próximos años, la inteligencia artificial y la automatización cambiarán el proceso de desarrollo del software. Las aplicaciones serán auto-escritas y codificadas. Las tareas como la integración, la seguridad, las pruebas y el despliegue serán dictadas por AI, los datos y el aprendizaje automático en el nuevo AIOps.

Un enfoque basado en datos hará que el software adapte dinámicamente su comportamiento en función de su entorno, al igual que otras tecnologías impulsadas por la inteligencia artificial.

Además, este cambio significativo de aplicaciones programadas a no programadas exigirá una mejor gestión de la seguridad y la funcionalidad y permitirá a los desarrolladores centrarse en la actividad de valor añadido.

Descubre la innovación

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